Por Eduardo A. Hapke/ Miami. Una iniciativa de United Way busca mejorar la educación temprana entre niños de cero a tres años de edad. Trabajan en Miami y en la región de América Latina.
La entidad sin fines de lucro United Way en Miami existe desde 1924. Como una organización casi centenaria, posee una infinidad de programas, entre los que se destaca la iniciativa internacional de educación temprana, que además de desarrollarse aquí en Miami, a partir de marzo de 2012, tiene sus pilares en once países de la región, donde también se encuentran las sedes de United Way. ¿Y por qué es fundamental la educación temprana? Simple, porque el cerebro de los niños entre cero y tres años, tiene un desarrollo de un 85%. “Tienen hambre de conocimiento”, afirmó Ana Martínez, directora de desarrollo de United Way de Miami, con quien Negocios Magazine, dialogó en sus oficinas de Miami.
United Way es la plataforma sobre la cual se lanzó esta iniciativa internacional sobre la educación temprana. “La iniciativa internacional está basada en la educación temprana y lo que es elevar la calidad de la misma en toda la región. Nosotros aquí en Miami tenemos el centro de excelencia de educación temprana, el cual es una entidad que está reconocida mundialmente. Lo que estamos haciendo es creando una oportunidad de buscar una solución al problema que existe en todos nuestros países, en que los niños necesitan estar listos para ingresar a la escuela.
La educación temprana es de cero a seis años y para que el niño pueda entrar a la escuela, ya equipado por completo a poder adquirir información necesita una base fundamental de aprender a cómo pensar”, aseguró Ana Martínez, directora de desarrollo de United Way de Miami. Los países que participan en el programa de educación temprana son los siguientes: México, Guatemala, Honduras, Costa Rica, Panamá, Colombia, Venezuela, Perú, Brasil, Chile y Argentina, a lo que hay que agregar a la ciudad de Miami, quien también participa como sede de la iniciativa. Las principales empresas y organizaciones que colaboran con este gran proyecto internacional son: Fedex,Eastman, Merrill Lynch, Bank of America, Emerson, además de dos decenas más de empresas que apoyan de una manera u otra este proyecto educativo.
Educación temprana
“La necesidad de una educación temprana existe aquí en Miami y en todos los países. Esta necesidad existe en todos lados, para nosotros el que haya acceso a esa capacitación que es indispensable, es clave para elevar la calidad de esa educación temprana”, comentó Ana Martínez. En general los niños ingresan a la escuela entre los 4 y 5 años. Pero la clave de la educación temprana está en cómo se puede trabajar con el niño antes de su ingreso a la escolaridad. “Ese niño tiene hambre por aprender, y hay que darle de comer desde un punto de vista intelectual para que pueda desarrollarse y que cuando ingrese a la escuela esté listo para aprender. Es como un adiestramiento, es ensenarle cómo poder absorber la información que está recibiendo”, destacó Ana Martínez.
El cerebro del niño en los primeros tres años de vida tiene un desarrollo de un 85%. La educación temprana también se puede dar en el hogar, con libros, colores, matemáticas, no necesariamente, a pesar de ser lo ideal, por la capacitación que tienen los docentes, de enviar a los niños a centros de educación temprana, ya desde los primeros meses de vida del niño. “Esta iniciativa internacional que estamos actualizando en la región, que incorpora a Miami como si fuera un país más, es algo único. Aunque todos tenemos la misma misión, está siendo ejecutada muy particularmente en cada país, según la circunstancia de ese sitio. Esta dualidad, nos da flexibilidad y nos hace muy distintivos y únicos”, afirmó Ana Martínez.
Datos en la región
Algunos datos de la región impactan. Por ejemplo, el 92% de los niños en América latina comienza la escuela primaria, pero solo el 32% continua la escuela secundaria.
El 70% de los estudiantes de tercer grado en la región no pueden leer al nivel de su grado, esto quiere decir que sólo el 30% está al nivel de lectura de su edad. Comparado con los Estados Unidos, un 60% de niños de tercer grado lee a su nivel, lo que también es una cifra baja y tiene que ser mejorada. Por otro lado, en algunos países, como ser Chile, Brasil, Colombia, Guatemala y Honduras, menos del 50% de los niños tienen acceso a la posibilidad de la educación temprana. “En los centros de educación temprana, el niño hasta cierto punto es su propio maestro, al hacerle experimentar su medio ambiente y que aprenda a hacerse inquisiciones y preguntas a sí mismo y a las personas a las que tiene alrededor, lo que está aprendiendo es una metodología, de cómo hacerse preguntas y esa es la manera de adquirir información”, explicó Martínez.
Inversión social
“Esto no es sólo responsabilidad social, esto es inversión social, porque ese niño es el joven del futuro, el adulto del futuro, el ejecutivo del futuro y el gobernante del futuro y esa cantidad monetaria, de tiempo o de interés que una persona o una entidad preste esta más medida como inversión que como contribución. Porque sabemos que cada moneda, cada hora va a regresar, en creces por la inversión que se hace.
Nosotros estamos en este momento en lo que es la etapa inicial de este proyecto y sabemos que en los próximos años, no solo va a estar la ejecución, sino también la evaluación para decir si hemos logrado hacerlo bien, cambiar, o reorientar, la dirección que tiene la iniciativa. El propósito es elevar la calidad de la educación temprana de los niños”, destacó Ana Martínez.
El proyecto o iniciativa internacional de educación temprana está financiado por entidades privadas que aportan dinero para que este tipo de educación clave, llegue a los países y niños que más lo necesitan. “Las entidades que en este momento están participando en la iniciativa están muy orgullosas de ser parte de esta colaboración tan indispensable.
Una de las cosas que nosotros tenemos como prioridad es abrir las puertas a todas aquellas personas u organizaciones que quieran unirse a este esfuerzo. Es una iniciativa multinacional para poder apoyarla desde un punto de vista monetario que se convierte en una forma eficiente y rápida de adquirir resultados”, finalizó Ana Martínez.