Redacción/ Miami.
Comenzó el momento soñado por muchos constructores, quienes quieren beneficiarse con la construcción del muro fronterizo entre Estados Unidos y México. El proceso donde se recibirán ofertas y proyectos se ha abierto y las principales constructoras están preparando sus mejores ases bajo la manga para proponer la idea que significaría ganar un contrato multimillonario.
A pesar de todos los desafíos legales y logísticos que la promesa de campaña de Donald Trump enfrenta y seguirá enfrentando, su idea y propósito sobre el muro fronterizo siguen latentes.
Quien quiera ganarse esta licitación no la tendrá nada fácil, ya que este muro que sería erigido en la frontera del suroeste de Estados Unidos, iría desde San Diego, California, hasta Brownsville, Texas. Donald Trump quiere un muro imponente y que genere respeto y temor, por lo que exige que éste mida por lo menos 18 pies de alto, aunque su idea original es que mida 30 pies.
También se pide que la estructura del polémico muro esté hecha de un material antideslizante, para que le quede imposible escalarlo a los arriesgados inmigrantes que traten de hacerlo, además que igualmente sea sólido y robusto, para que herramientas, como cinceles, hachas, taladros y otras no puedan dañarlo. Igualmente se exige que este muro comience desde 6 pies bajo la tierra para que quienes planean cavar túneles frustren su plan.
Otras exigencias son la construcción de puertas corredizas para que autos y peatones que tengan autorización puedan entrar o salir a través de éstas e irónicamente se pide también un sentido estético del muro, por lo menos en el lado que los estadounidenses podrán ver, donde el color sea agradable a la vista y combine con el ambiente del lugar, a pesar de que es un muro que separa transgresoramente dos países, jugando un papel de maltrato sicológico evidente, donde se planea imponer miedo y se pretende crear un aire de superioridad. Un arma bien conocida por los nazis de la Segunda Guerra Mundial.
A pesar de que la mayoría de republicanos están de acuerdo con la construcción de este muro, existen otros que ven ésta idea inviable, ya que este muro crearía tensiones entre los 2 países, teniendo en cuenta lo importante que es México para la economía estadounidense.
Un punto que no está claro todavía es la financiación del muro, donde Trump ya solicitó al Congreso $4 billones de dólares para comenzar con la planeación del muro, pero los expertos y el Departamento de Seguridad Nacional estiman que en total se tendrían que invertir unos $21 billones de dólares para la construcción total del muro.
Ya existen más de 700 compañías que se han registrado en la página web como interesados y ofreciendo sus servicios para quedarse con el jugoso contrato, y el Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza informó que quienes estén interesados en presentar papeleo y proyectos, tienen como plazo hasta el 29 de marzo.