Redacción/ Miami
El presidente argentino Mauricio Macri, ha decidido conceder una gran parte de la obra pública a constructoras de Estados Unidos, mediante uniones transitorias de empresas (UTE) con socios argentinos. El nexo es la Cámara de Empresarios de Estados Unidos (AmCham), cuyos directivos acompañaron las reuniones de Macri y el secretario de Estado John Kerry.
Las nuevas UTEs estarían enmarcadas mediante una ley que pretende regular las asociaciones pública-privadas. Para acompañar ese proceso, están redactando otro proyecto de ley para las licitaciones y ejecuciones de las obras, con cambios significativos como eliminar cualquier pago adelantado a los beneficiarios.
Emisarios del Gobierno mantuvieron reuniones con directivos de Progress Rail Services Corporation, uno de los más grandes proveedores de material ferrocarril del mundo; y CH2 Hill, dedicada a la consultoría de construcción de obras públicas.