Miami, miércoles 27 de octubre de 2021. A pesar de la pandemia y del aumento de los viajes de bajo costo que despegan por todo el mundo, la compañía aérea de origen colombiano Viva Air, logró expandirse en los Estados Unidos y en la región, brindando viajes asequibles a los pasajeros de todo el continente americano.
Anteriormente conocida como Viva Colombia, en mayo de 2021 la compañía cambió su imagen y nombre a ‘Viva Air’ para facilitar su transformación en la industria aérea y el desarrollo en toda la región. Con sede en Medellín, Colombia, la compañía lleva su innovadora visión estratégica a países de América Latina con viajes asequibles, servicio de alta calidad, rutas extensas, puntualidad, nuevos aviones y sostenibilidad social.
Viva Air está liderando el repunte de la industria en la región. Ya en 2021, la compañía se ha recuperado en un 120% en comparación con sus números de pandemia y ha crecido un 17% en comparación con 2019, debido a la nueva apertura de nuevas rutas nacionales e internacionales.
Viva Air actualmente ofrece 30 rutas nacionales alrededor de Colombia, 5 rutas nacionales alrededor de Perú y rutas internacionales a México (2 destinos) y los Estados Unidos (2 destinos). Desde 2015, Viva Air ha operado rutas a Miami, Florida y actualmente ofrece hasta 17 vuelos semanales, lo que la convierte en una de las rutas más exitosas de la aerolínea. En julio de 2021, la aerolínea inauguró su segundo vuelo a Estados Unidos, aterrizando en Orlando, Florida, aumentando sus conexiones con Norteamérica. En un futuro inmediato, la aerolínea busca llegar a aproximadamente 50 millones de pasajeros y agregar 15 nuevas rutas internacionales adicionales entre 2022-2025.
Negocios Magazine dialogó con Jason Bewley, quien desde 2019 es vicepresidente financiero del Grupo Viva, acerca de los desafíos que enfrenta la empresa en los años venideros.
Negocios Magazine: ¿Viva Air quiere ser líder en la región como una compañía de bajo costo?
Jason Bewley: Eso es correcto, queremos ser la principal aerolínea de bajo costo en la región. Somos la más grande low cost en el continente, proveyendo servicios de conexión desde Norteamérica y Centroamérica hacia Sur América.
NM: ¿Cómo manejaron ustedes la difícil situación de la pandemia?
JB: Sufrimos el segundo cierre de comercio más largo del mundo en Colombia, creo que en Argentina fue el primero. Estuvimos cerrados por 6 meses completos, más o menos lo mismo en Perú, y esto afectó bastante a Viva Air. Nos reestructuramos de manera privada, por ejemplo, fuimos a donde los vendedores y les revisamos contratos y las tarifas. No sacrificamos empleados como en otros lugares, los mantuvimos en su gran mayoría en su puesto. Algunos tuvieron cortes en sus salarios, pero después fueron reembolsados. Hoy en día los empleados regresaron a la normalidad, todas las plazas están llenas y tenemos más posiciones que en 2019. Hoy se pagan menos costos, por ejemplo, por las aeronaves, tenemos mejores contratos con nuestros proveedores, estas son unas razones por las cuales nos hemos convertido en una empresa más eficiente. No fue un periodo fácil, pero estamos tomando más fuerza y somos más grandes que hace dos años.
NM: Una de las estrategias de Viva Air que conocemos es bajar el precio para que los tiquetes sean más baratos, ¿cómo logran esto?
JB: Nos vamos al nivel más básico, cuando compras un tiquete puedes escoger cosas como el asiento, llevar equipaje de mano, si quieres llegar más temprano… todos estos servicios tienen un costo adicional, así que nosotros tratamos de romper el producto a sus piezas más básicas y fundamentales. Sumado a esto, para hacer que estos costos sean lo más bajos posibles, hacemos que las operaciones en todos los campos sean lo más directas y sencillas posibles. No queremos complicar el negocio, tenemos competencia que ofrece clase de negocios, salas de espera de negocios, programas de viajeros frecuentes… y esto realmente complica el negocio. Es muy bueno tener todos esos servicios y algunos clientes los desean y prefieren, pero si quieres traer el producto más básico al precio más económico, debes simplificar el negocio, y eso es lo que hacemos.
NM: ¿Cuál es el costo más difícil de bajar para una low cost?
JB: El negocio de las aerolíneas en general tiene un alto porcentaje de costo fijo, en el cual se incluye, por ejemplo, los costos de los aviones, firmamos contratos con estas aeronaves por más de 10 años, generalmente hay renegociación de dichos contratos, y estos no varían así vuele o no el avión. Siempre se pagará el mismo precio por el aparato en la renta básica, así que son precios muy altos que son muy difíciles de bajar, pero lo pudimos hacer en la pandemia, la cual ha sido una situación muy inusual. Nuestra competencia lo hizo en el núcleo, nosotros lo hicimos fuera del núcleo. Hay otros precios altos como el de los empleados, hay un componente variable ahí, pero al final del día si hay una pandemia y tienes que cerrar la aerolínea porque cierran las fronteras, se debe seguir respondiendo por los salarios. De manera que, si tratamos de bajar los costos en unidades básicas, debemos volar nuestras aeronaves por más horas al día, pero haciendo esto el costo de cada empleado baja un poco más de precio.
Otro costo como la gasolina es un 100% variable, las tarifas de aterrizaje también, la estación de la aerolínea como el mostrador y las salas de espera son precios fijos también, que se agregan a los mencionados antes, así que la única manera de bajar estos costos eficientemente es haciendo crecer la aerolínea y sacar el máximo provecho de cada avión todos los días, en esto nos enfocamos.
NM: Hablando del costo, teniendo el hub en Medellín en lugar de Bogotá, ¿Hace que se reduzcan los precios?
JB: Es más económico y no solo en el sentido de cuánto cuesta volar desde Medellín vs. Bogotá, es más barato porque hay menos congestión, en Bogotá el aeropuerto es más ocupado, es una capital, también es usada por los militares…no sólo por el clima, sino por muchos factores, lo que hace que el aeropuerto de Bogotá sea menos eficiente que el de Medellín. Ese es el costo, despegar, aterrizar, llegar a la puerta a tiempo… y usando el aeropuerto de Medellín vemos que hay menos congestión y por eso bajan los costos, no sólo para la gente que viaja desde Medellín, sino también para la gente que hace conexión con Medellín. Es una ciudad en la cual nos podemos conectar con el norte y el sur, podemos ir desde Atlanta, Orlando, la ciudad de México o Cancún y que desde ahí sigan hacia el sur, como Lima, Buenos Aires o Santiago en un futuro. Es un buen punto geográfico de conexión.
NM: ¿Crees que habrá más competencia de aerolíneas de bajo costo en la región?
JB: Ya sabemos de una aerolínea que comenzará operaciones pronto y va a ser competencia aquí en Suramérica, esperamos que comiencen a ofrecer más vuelos nacionales en Colombia o Perú. En Colombia tenemos nombre, y en el mundo estamos entre los primeros 3 o 4 primeros puestos de aerolíneas a bajo costo, así que, en términos de competencia, sean bienvenidos… se están enfrentando a una de las aerolíneas más fuertes del mundo.
Fundada en 2012, Viva Air es un grupo pionero de aerolíneas de bajo costo en la región, creado por Irlandia Aviation, conocida por potenciar a algunas de las principales aerolíneas de bajo costo del mundo, como Ryanair. Hoy en día, Viva Air aplica el exitoso modelo europeo en América Latina, mientras se mantiene comprometida con la democratización de los viajes. La compañía ahora busca atraer a una diversidad de viajeros de diferentes orígenes económicos, sociales y culturales para enriquecer su base de consumidores.
