Redacción/ Miami.
La última reunión de la Reserva Federal con Janet Yellen como presidenta acabó sin sorpresas y con una decisión que deja el horizonte a los próximos gestores del organismo que decide el valor del dinero en Estados Unidos. Yellen anunció en el día de ayer que la Reserva Federal ha decidido mantener los tipos de interés en el rango objetivo del 1,25% y el 1,5%. De esa forma, Yellen abandona la Reserva Federal manteniendo el precio del dólar como lo había dejado a lo largo de 2017.
No obstante, Yellen ha asegurado que la Reserva Federal espera que el futuro sea benévolo para la economía estadounidense. “Esperamos que las condiciones económicas evolucionen de manera que garanticen aumentos graduales adicionales en los tipos de interés; es probable que los tipos permanezcan, por algún tiempo, por debajo de los niveles que se esperarían a largo plazo”. El comunicado del Comité Federal de Mercado Abierto de la Reserva Federal ha proseguido en su comunicado asegurando que “sin embargo, la ruta real de los tipos de interés marcados por la Fed dependerá de la perspectiva económica, según la información que muestren los datos que se vayan recibiendo”. Habrá que esperar si la situación económica de Estados Unidos se mantiene con un horizonte positivo, como ha acabado el pasado año con una tasa de empleo en continuo descenso y una producción económica ascendente.
Los datos son claros: en los cuatro años de Yellen como presidenta de la Fed, la economía estadounidense ha sumado cerca de 10 millones de puestos de trabajo y el desempleo ha caído hasta el 4,1%, en mínimos de los últimos 17 años. Yellen llegó en febrero de 2014 a la presidencia de la Reserva Federal, desde entonces se han subido los tipos en cinco ocasiones, con incrementos de 25 puntos básicos en cada una de ellas.