Por Patricio Sepúlveda, presidente de la Chile-US Chamber of Commerce
Tengo el privilegio en la vida de trabajar en algo que me apasionó desde muy pequeño… la aviación. Siempre organizábamos un tour en la Universidad para ir a alguna parte en avión. Por ese motivo cuando haciendo un curso de postgrado en Evaluación Social y Privada de Proyectos de Inversión en la U. Católica de Chile me ofrecieron un posición en el departamento de Planificación de LAN (hoy LATAM), no dudé un momento en aceptar, y es lo que hago hasta hoy.
El transporte aéreo es un factor de conectividad, de integración, de desarrollo económico, generador de empleos y en consecuencia de disminución de la pobreza en los países.
En el año 2003 trabajaba para IATA en Chile y me ascendieron a vicepresidente regional para América Latina y el Caribe, con lo que me establecí definitivamente en Estados Unidos, un país también maravilloso como Chile. A USA viajaba constantemente porque mueve un 40% de la aviación mundial y marca tendencias en la aeronáutica a nivel global, y este sector no tiene fronteras y es global.
Respecto a nuestra cámara de Comercio, sus directores, miembros y amigos son una colectividad maravillosa, y me invitaron a participar en el directorio, pero en la elección del directorio me sorprendieron eligiéndome su presidente. Es una responsabilidad muy grande y hemos conformado un equipo de gran nivel. En pocos meses prácticamente hemos duplicado la membresía. Hemos recibido recientemente a importantes autoridades de Chile que se han reunido con la comunidad de nuestra Cámara haciendo exposiciones de gran nivel, como por ejemplo, el canciller Heraldo Muñoz, el ministro de Economía Fomento y Turismo, Luis Felipe Céspedes.
Nuestros planes de acción están enmarcados en nuestra visión que consisten en que Chile-US Chamber of Commerce sea un puente para los inversionistas, profesionales y empresarios de Chile.