Miami, 30 de agosto de 2013. Fomentar estilos de vida saludables en alimentación y actividad física ayudará a promover y mantener la salud. La educación sanitaria comprende un amplio abanico de temas.
Menús saludables
Uno de estos asuntos es la promoción de una alimentación saludable y una dieta equilibrada. En este sentido, se podrá:
- Ofrecer menús saludables en el comedor de las empresas.
- Fomentar el consumo de desayunos saludables (por ejemplo, colocando máquinas que ofrezcan no únicamente bollería industrial y café, sino también zumos, frutas, galletas integrales, etc.).
- Contar con dispensadores de agua fresca para el consumo de los trabajadores que estén ubicados en lugares próximos para todos.
- En la organización de reuniones de trabajo, ofrecer fruta, zumos y agua en vez de pastas, bollería y café.
- Promover acuerdos con los bares y restaurantes próximos para que ofrezcan más de una variante saludable del menú diario.
- Concienciar y promover la reducción del consumo de bebidas alcohólicas. una forma sencilla y efectiva de aumentar la actividad física es ir a trabajar en bicicleta o andando. además, son prácticas aptas para la mayoría de las edades y los estados físicos.
El objetivo es promover la alimentación saludable es luchar contra la creciente tendencia a la obesidad y el alarmante aumento de enfermedades crónicas en las sociedades desarrolladas. Uno de los principales ámbitos de actuación es la buena alimentación en el entorno laboral, ya que todo trabajador pasa muchas horas en su puesto de trabajo y comer adecuadamente fuera de casa ayuda a mantener la oportuna variabilidad y el equilibrio alimentario. 
El Departamento de Salud recomienda la práctica de un mínimo de treinta minutos diarios de actividad física moderada:
Subir las escaleras
Subir las escaleras es una forma fácil y efectiva de aumentar la actividad física diaria con los medios existentes. Otro aspecto que tener en cuenta es la promoción del deporte y la actividad física en el ámbito de la organización. Las acciones prácticas en este ámbito podrían ser:
- Fomentar el estilo de vida activo dentro y fuera del ámbito de trabajo (por ejemplo, ir y volver a pie o en bicicleta, subir las escaleras en lugar de coger el ascensor, etc.);
- Habilitar espacios para practicar actividades deportivas o gimnasios dentro de los centros de trabajo; >
- Organizar actividades, actos o competiciones deportivas, que además fomentarán el trabajo en equipo y la competencia saludable;
- Participar en actividades o competiciones entre diferentes empresas.
- Patrocinar actos deportivos.
- Establecer convenios con gimnasios o instalaciones deportivas externas, que ofrezcan planes y gastos favorables o bonos de descuento a los trabajadores de la compañía.
Ventajas de la actividad física
La información sobre las numerosas ventajas de la actividad física se puede acompañar de la oferta de espacios, instalaciones para la práctica de esta actividad en el mismo edificio de la empresa, o de proporcionar cuotas reducidas en equipamientos deportivos fuera del puesto de trabajo.
Otra acción en este sentido sería promover planes de concienciación y prevención sobre enfermedades, factores de riesgo y comportamientos poco saludables, como establecer planes prácticos para dejar de fumar (a través del diseño de un proyecto que no únicamente cumpla la ley, sino que ayude a los trabajadores fumadores a conocer los verdaderos riesgos de este hábito y los ayude a disminuirlo y a dejarlo completamente a través de apoyo, actividades, charlas, etc.).
Prácticas beneficiosas para la salud
Todas estas ideas dependerán de las iniciativas, características y posibilidades de cada organización, pero toda empresa saludable debe trabajar sobre un plan estratégico de educación sanitaria y prácticas beneficiosas para la salud, que será el punto central para todos sus integrantes. Además, ayudará a consolidar la imagen corporativa como referencia de salud, lo cual convertirá a la empresa en un sitio atractivo tanto para los actuales como para los futuros trabajadores. promoción de horarios razonables Además de la adaptación de los horarios de trabajo de acuerdo con la realidad personal, también se pueden desarrollar distintas medidas con respecto al cumplimiento de horarios que favorecerán tanto el bienestar de los trabajadores como la consecución de los objetivos globales de la organización. Por ejemplo, establecer en ocho horas reales la jornada de trabajo, con posibilidades de diferentes horarios de entrada y salida, para que se cumplan sin problemas. En este sentido, también es importante el respeto de horarios y tiempos de reuniones, que en ocasiones son numerosas y extenuantes y sólo con- siguen cansar a los participantes, sin que se logre nada concreto.
Pautas claras acerca del uso de las redes sociales, teléfono
Lo principal es dar prioridad a lo importante, que debería ocupar mayor tiempo que lo urgente; es un desafío que parece casi imposible, pero que puede alcanzarse con una buena organización y mediante la práctica diaria. Una vez convocada la reunión, habrá que ser muy disciplinados con respecto al tiempo de duración de las mismas, tener pautas claras acerca del uso del teléfono y el correo electrónico, orientar las actividades hacia resultados y no tareas y evitar la interrupción innecesaria del trabajo de los demás.
Fuente:
Miquel Valls